Hoje quero Ouvir eu te Amo
CÓMO SABER ESCUCHAR
Las palabras más comúnmente usadas significan cosas distintas para personas distintas.
A la mayor parte de nosotros nos preocupa casi siempre exponer nuestros propios puntos de vista, y tendemos a considerar lo que dicen otras personas como una tediosa interrupción del flujo de nuestras proprias ideas. Ideas cuya mayor parte son creencias sin experiencia. Lo que creemos no es descubierto por una serie de actos en la realidad, sino que nos es inculcado desde la infancia por nuestros padres, la escuela, la presión socio-comercial-religioso-política.
Ayer conversé con una persona que me pareció completamente ajena a lo que yo le estaba comunicando. Tuve ganas de decirle:
"Digo lo que digo, pero lo que tú escuchas no es lo que digo sino lo que tú crees que estoy diciendo. Olvídate de tus creencias, vacía tu mente, abre tu corazón y entonces escucharás lo que te dicen."
Vaciar la mente? ¿Cómo?
Cada uno de nosotros posee no solamente un yo, sino un auto-concepto. Todos suprimimos, hasta cierto punto, aquella información con la que no nos gusta enfrentarnos, ya sea sobre nosotros mismos o sobre cualquier otro asunto. El auto-concepto incluye solamente lo que somos capaces de decirnos a nosotros sobre nosotros mismos.
De la misma manera que el mapa no es el territorio, el auto-concepto, de igual modo, nunca incluye todo el yo.
Como el propósito básico de nuestra actividad vital es la protección, manteniemiento y perfeccionamiento de nuestro auto-concepto, teniendo gran prisa en llegar a ser más de lo que somos, defendiendo nuestras particularidades, no nos damos tiempo de escuchar a los otros. Pêro sí nos damos tiempo de enfurecernos y atacar a todo lo que se nos presenta como ajeno.
Esta actitud no nos permite desarrollarnos plenamente. Vivimos enquistados en nuestra personalidad infantil, encerrados en un mundo limitado, tal un pollo que no quiere romper la cáscara del huevo que lo contiene. Ese huevo está formado por la sociedad estacionaria, aquella que rechaza todo cambio esencial.
Una persona plenamente desarrollada está en y es de la sociedad de la que es miembro, pero no es prisionera de dicha sociedad. Sabe ver el autismo de los otros pero también puede reconocer y admirar cualquier valor que tengan los otros.
"Dado que pocos son verdaderamente sinceros con ellos mismos, es indudable que pueden existir en ellos pensamientos, sentimiento, deseos y necesidades que no han tenido ocasión de sentir. Si cambiara su actitud de defender tercamente sus auto-definiciones podrían despertarsus valores sublimes."
Cambiando nuestra mirada interior podemos liberarnos de esos problemas debidos a la carencia de conocimiento de nosotros mismos. Y el conocimiento de nosotros mismos es necesario y anterior a todas las demas clases de conocimiento.
¿Cuando decimos "nosotros mismos" debemos comprender que estamos separados de los otros, cual una isla? De ninguna manera. Somos una infima parte de una unidad eterna e infinita. Más que individuos somos una humanidad. Y más que eso: somos una unidad cósmica. No vivimos en un país, en un planeta, sino en un gigantesco, inmenso, misterioso, tremendo universo. Conocerse a si mismo es conocer el mundo infinito y eterno que está en nosotros.
Oir a los otros es oirnos. Amar a los otros es amarnos. Dar a los otros es darnos. Para saber escuchar es necesario saber hacer reinar el silencio en nuestro interior. El cerebro jace resonar en su materia, sin cesar, palabras que lo ensordecen. El corazón no piensa, late y esos latidos se unen a los latidos de todos los otros corazones.
Escuchar al otro es acompañar cariñosamente al auténtico yo del otro, sin aprobar o desaprobar su auto-concepto.
Alguém consegue me ouvir? Existe um eco enorme quando meu coração pulsa, pulsa forte, aos poucos se acalenta, quer parar e não existe dor maior do que um coração tão vivo buscando repouso no frio.
Queria eu ter o poder de mudar o mundo de alguém.
É tão fácil você parar e escutar alguém desabafar
Ao mesmo tempo tão dificil porque na verdade
Minha vontade é tomar aquela vida arrumar tudo e entregar tudo resolvido e apenas dizer,era assim que tinha que ser feito.
Mais não é bem assim que funciona, o que te acho bom para mim pro outro não será,o que me causa muita dor em você poderá fazer algumas cócegas.
Podemos até ajudar mostrando nosso ponto de vista
Mais são coisas da vida e ela segue independente de tudo.
E se você não pode mudar o mundo de alguém
Plante umas flores faça um jardim bem bonito e aproveite o que há de melhor por ali.
Hoje eu quero arrumar a minha alma!
O meu céu...
Os meus sonhos!
Quero passar um final de semana com glórias.
Com bons pensamentos.
Com novas esperanças...
Com céu de estrelas e arco-iris todos juntos.
Quero enfeitar a minha paz, de luzes e brilhos.
Ouvir a minha canção preferida.
Me vesti de todas as cores.
E criar asas...
Para tirar um pouquinho os pés do chão.
Quero sonhos diferentes
para movimentar a minha vida...
Porque a felicidade não para.
Ela é feita de alegrias!
E quando ouvimos todas as vozes dissonantes, deixamos de ouvir a mais importante que é a voz interior...
Nem tudo é mar de rosas nessa vida cruel.
As pessoas enganam , e enganam muito bem.
Se quer que as coisas deem certo, vá atras de quem te da valor e ouça conselhos de quem já passou pelos mesmos causos.
Nada se compara ao processo permanente de ouvir os clientes, colher seu feedback, para melhorar a relação e o desempenho da equipe.
O que os jornais dizem é o que as pessoas acham que as outras estão falando - e acabam falando também. Por isso, nem sempre, ouvimos e falamos a voz da sociedade.
É tão comum, ao longo da nossa vida, nos fazermos de fortes... inatingíveis... invulneráveis....
Sustentamos uma imagem de intocável... de alguém que não precisa de carinho... de afeto... Por medo, pavor mesmo de demonstrarmos que muitas vezes estamos frágeis, carentes... necessitados de um abraço... de alguém que nos ouça sem comentários... sem cobranças...
Que simplesmente nos ouça... Melhor ainda, se nos ouvir com um olhar de carinho, de aceitação... Sem interesse nenhum, que não seja o de nos ouvir mesmo... com total respeito pelo que estamos dizendo!
Não precisa concordar, nem tampouco discordar... Ou dar opinião... só ouvir de verdade... com atenção. Sem conclusões...
Ser um humano é estranho porque não reconhecemos em nós mesmos a característica de pensar e transformar o mundo, as palavras são tão vazias quanto o altruísmo pelo outro. É mais fácil falar e gritar do que ouvir e auto se reformular dos próprios conceitos e hábitos.