Algunas veces no era la luz en una... Anita Blake
Algunas veces no era la luz en una persona lo que te hacía caer enamorado, sino la oscuridad. A veces no es el optimista lo que necesitas, sino otro pesimista que
camine a tu lado y conozca, con absoluta certeza, que ese sonido en la oscuridad es un monstruo, y que realmente es tan malo como tú piensas.