A veces, nos cruzamos con personas que parecen tener un comentario para todo: los envidiosos, los chismosos, las personas que critican sin saber... Si estás cansado/a de sus opiniones no solicitadas y quieres una respuesta ingeniosa, estás en el lugar indicado. ¡Aquí encontrarás las mejores frases para callar bocas con estilo y un toque de humor!
Tu envidia es mi mejor halago, sigue así, gracias por la motivación.
La envidia es como el mal aliento, todos lo notan menos tú.
Lo que presumes es temporal, lo que eres es permanente.
Si lo único que tienes es dinero, te falta demasiado.
Lo material es pasajero, pero la clase nunca se pierde
La envidia es la sombra del fracaso, no te quedes ahí.
Si tu crítica construyera algo, el mundo sería mejor.
No necesito tu aprobación para seguir siendo quien soy.
Es fácil criticar desde el sofá, difícil es hacer algo al respecto.
Puedes decirme lo que quieras pero igual te interesa saber que no me afectará.
Lo bueno de tus críticas es que, muy a tu pesar, siempre me hicieron más fuerte.
Si tu opinión pagase mis cuentas, me interesaría, avisa cuando sea así para escucharte.
La diferencia entre tú y yo es que mientras tú criticas, yo actúo.
No te preocupes tanto por lo que tengo, que aún me falta mucho por lograr.
Ya que te fijas tanto en mi, ¿por qué no aprovechas para inspirarte?
Entiendo que quieras opinar, pero no todos los consejos son necesarios.
No dudo de tu capacidad, pero la mía no depende de tu validación.
Sé que te sientes en la cima, pero desde aquí abajo también se ven las estrellas.
Cada uno con su verdad, y esta claro que no comparto la tuya.
Me alegra que estés tan pendiente de mí; a mí, en cambio, no me importa lo que tú hagas.
Mientras tú envidias mi camino, yo disfruto cada paso que doy.
Tienes derecho a opinar, pero no eso no significa que a mi me vaya importar.
Gracias por tu preocupación, pero ya me encargo yo de ser feliz.
¿Tienes idea de cuánto aire se podría ahorrar si callaras por un minuto?
Te escucho, pero prefiero seguir lo que me dicta mi corazón.
La próxima vez que me critiques, asegúrate de haber hecho algo mejor.
Te noto muy seguro criticando desde la sombra; te reto a salir a la luz.
Si dedicaras tanto tiempo a tu vida como a la mía, serías imparable.
No estoy aquí para gustarte, pero respétame, mantengamos unos mínimos de educación.
Criticar lo que no entiendes solo demuestra tu ignorancia.
Tus palabras no me definen, mis acciones sí.
Lo que presumes hoy, puede desaparecer mañana.
Tu opinión para mi es lo mismo que un anuncio de Youtube, ¡lo ignoro en 5 segundos!
No tengo que causarte una buena impresión porque no soy una impresora.
No hay ningún problema en saber que no te gusto, ya sé que no todo el mundo tiene buen gusto.
¿Sueles ser tan incoherente o estamos en un día especial?
En este momento estoy ocupado/a, ¿puedo ignorarte en otro momento?
No me preocupa lo que pienses porque sé que es algo que no haces mucho.
No es que te odie pero cuando pienso en ti es como cuando llega el lunes.
Prefiero tener poco y ser auténtico, que mucho y no tener nada dentro.
Presumir no te hace mejor, solo más ruidoso.
Alardear no impresiona, la humildad sí.
No soy muy bueno/a en matemáticas, pero estoy seguro/a de que no sumas nada a mi vida.
Si no quieres oír una respuesta sarcástica, no hagas comentarios estúpidos.
Hoy no tengo tiempo para escucharte. Vuelve el 30 de febrero del año que viene.
Lo importante no es lo que tienes, es lo que eres sin ello.
Hoy no tengo tiempo para perderlo con alguien que no me aporta nada.
Pensé en contestarte, luego recordé que no te debo nada.
Gracias por enseñarme lo que no me gusta de las personas.
Si te pagaran por decir estupideces, ya te habrías hecho rico.
Hace un día hermoso para vivir tu vida. ¡Aprovéchalo!
La envidia es una enfermedad horrible. Espero que te cures pronto.
Si tienes que gritar lo que vales, quizá no es tanto.
Si mi vida fuera una película, te pondría en pausa... indefinidamente.
¿Te das cuenta de que con un poco de silencio mejorarías el 100% de tus argumentos?
A veces pienso que deberías ser embajador... pero de la República de tu propio ego.
Si fueras una página web, ya te habría cerrado la pestaña hace rato.
Gracias por tu comentario, lo archivaré en el lugar de 'cosas irrelevantes'.
No sé si reír o preocuparme por lo mucho que te gusta hablar sin sentido.
Tus palabras son como el tráfico: largas, molestas y sin destino claro.
Tienes derecho a opinar... igual que yo tengo derecho a cambiar de tema.
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